Tratamiento para verrugas | Remedios y técnicas
Las verrugas son lesiones cutáneas que pueden aparecer en cualquier área de la piel y que se desarrollan a causa del virus del papiloma humano. Estas lesiones son en realidad crecimientos en la epidermis, que pueden tener diferentes formas y que en muchas ocasiones pueden producir un gran picor o dolor en quienes las sufren.
Es una afección contagiosa que se transmite exclusivamente a través de las relaciones sexuales o por transmisión consanguínea.
Existen diferentes tipos, pero entre todas ellas destacan las verrugas planas, la plantares o las genitales.
El tratamiento para estas lesiones cutáneas debe estar supervisado por un médico dermatólogo, ya que si nosotros mismos intentamos extirparlas o cortarlas, lo que en realidad provocaremos será un efecto dominó en el que aparezcan un mayor número de verrugas y se diseminen en la piel del paciente.
Entre las técnicas más utilizadas por los médicos para la eliminación de las verrugas son:
-La criocirugía, en la que se congela la verruga mediante el nitrógeno líquido para su eliminación.
-La extirpación mediante técnicas quirúrgicas.
-La utilización del láser.
-La aplicación de soluciones basadas en ácido salicílico, muy potente contra las verrugas más leves.
-O finalmente, la electrocauterización.
Además de todas estas opciones, en la actualidad existen numerosas medicinas de venta en farmacias y sin necesidad de receta, que ofrecen la posibilidad de congelar la verruga en nuestra propia casa.
Existen muchas personas a las que la aparición de verrugas les supone un conflicto a nivel psicológico, ya que ven lastimada su estética y su propia autoestima.
Aunque existen algunos casos en los que estas lesiones desaparecen con el tiempo de forma espontánea, las verrugas generalmente deben ser tratadas bajo la supervisión de un médico, o al menos, a través de personal de enfermería especializado. En la amplia mayoría de los cuadros clínicos el pronóstico es muy positivo. Igualmente debemos recordar que las verrugas son lesiones que no debemos tocar o rascar, ya que esto provocaría complicaciones posteriores como la diseminación de las mismas, la formación de cicatrices posteriores en la zona afectada o la reaparición de verrugas que pueden llegar a tardar meses o incluso años en desaparecer completamente.