Tratamiento para las varices en las piernas | Eliminar las varices
Más popularmente en mujeres que superan la barrera de los 50 años que en hombres, las varices son venas que se hinchan y aumentan notoriamente su tamaño. Generalmente, esta dilatación provoca el característico color azulado que tinta dichas venitas. Las formas varían entre los diferentes casos, pero generalmente las varices suelen enrollarse entre ellas misma, adoptando un aspecto rizado.
Existen numerosas causas que producen la aparición de las varices, pero las más comunes son: la obesidad, la ingesta de hormonas, pasar horas de pie, el sedentarismo, vestir con prendas demasiado ajustadas.
Ésta es una de las enfermedades más extendidas a lo largo del mundo y está presente en cada uno de los continentes y no depende de climatologías ni de estratos sociales. Hay muchos problemas relacionados con las grasas, como la celulitis edematosa que pueden propiciar la aparición de varices en las piernas, sobre todo en los casos que tienden a acumular más grasa en esta zona.
Los síntomas más comunes y destacados de esta patología son:
– El cansancio y la pesadez extrema en la zona de las piernas.
– Los pinchazos y los calambres dolorosos.
– Un picor continuo en la zona donde se acumula la mayor parte de las varices.
– Y los tobillos que degeneran en una coloración grisácea.
Po supuesto, existen diferentes tipos de varices dependiendo del tamaño de las mismas y de la visibilidad cutánea por la que se caractericen.
Existen diferentes medios para luchar contra las varices:
A. Los tratamientos medios médicos:
– Como los tratamientos quirúrgicos en los que se extirpan directamente los paquetes varicosos.
– Los tratamientos esclerosantes en los que se necrosa la variz.
– O los tratamientos con microespuma esclerosante en los que se realiza una punción de la variz y se inyecta una microespuma esclerosante provocando que el organismo anule la vena.
Este tipo de tratamientos más invasivos se realizan por orden del médico cuando éstas se convierten en venas dolorosas o demasiado gruesas.
B. Los tratamientos naturales:
– Ciertas plantas medicinales como el Ginkgo Biloba, la Cayena o el Jengibre.
– La realización de ejercicio.
– La disminución del peso corporal.
– Intentar no oprimir dichas varices con ropa ajustada o cruzándolas entre ellas.
– Intentar reposar el cansancio que provocan dichas venas, extendiendo las piernas en alto.
– Seguir una dieta sana y equilibrada en la que destaquen los alimentos de origen vegetal.