Tratamientos para el asma | Principales técnicas y cuidados
En las reagudizaciones, se pueden utilizar estimulantes beta de acción corta, corticoides sistémicos e inhalados, anticolinérgicos inhalados y teofilinas de acción corta. En casos severos, puede ser necesaria la hospitalización. Se aconseja el empleo de estimulantes beta de acción rápida para los casos de crisis fuertes. Existen dos tipos de tratamiento dependiendo de la gravedad de la crisis:
Si la crisis es leve se emplean fármacos de tipo esteroideos y los b-adrenérgicos de acción prolongada, los cuales se administran por vía inhalatoria y casi siempre combinados, aunque también los hay que se administran por vía oral. Todos estos fármacos se administran de forma continua, es decir cada día, y bajo control facultativo. En caso de tener síntomas, tales como tos, secreción, etc., sin que se haya llegado a una crisis, se indicara medicamentos para controlar estos síntomas.
Si la crisis es aguda, el tratamiento se efectúa mediante medicación administrada a dosis elevadas y de forma continua, o a determinados intervalos, de un b-adrenérgico de corta duración junto con esteroides por vía intravenosa, intramuscular u oral y bajo la supervisión del médico.
Por ser una enfermedad crónica, no es curable, pero puede controlarse por medio de medidas preventivas que pueden evitar la aparición de la enfermedad, tales como:
- Evitar o abstenerse de inhalar gases potencialmente irritantes, fundamentalmente el del humo de tabaco. Así como otros gases contaminantes, tanto en el ámbito laboral (industrias químicas por ejemplo), como doméstico (humo de cocinas, aerosoles, etc.).
- Durante el periodo de dispersión del polen, mantener las ventanas del dormitorio cerradas tarde y noche y viajar con las ventanillas del coche cerradas. Considerar mudarse si se vive en una zona altamente influenciada por el polen.
- Para evitar los ácaros, se deberá cubrir con fundas tanto el colchón como la almohada, lavar con frecuencia fundas y ropa de la cama, con agua caliente, retirar o evitar cojines, tapizados de tela, alfombras, cortinas y moquetas, utilizar una aspiradora para la limpieza de la casa, limpiar el polvo con paño húmedo.
- Retirar los animales del domicilio.
- Sustituir las medicinas desencadenantes de crisis tales como aspirina e antiinflamatorios no esteroideos y b-bloqueantes por otros analgésicos como paracetamol, dextropropoxifeno, codeína, tramadol, tilitrate y derivados mórficos.
Otro aspecto importante en el aspecto preventivo es la educación del paciente asmático y su familia. El paciente debe ser adiestrado en:
- Conceptos sobre el asma y su tratamiento. Deben conocer: la naturaleza crónica de la enfermedad, diferencias entre inflamación y broncoconstricción, los síntomas de la enfermedad, y la diferencia entre los fármacos broncodilatadores (o de rescate) y los antiinflamatorios.
- Técnica de inhalación correcta para cada dispositivo que esté utilizando el enfermo.
- Reconocer y evitar los desencadenantes.
- Reconocer el empeoramiento de su asma.
- Plan de autotratamiento. Medidas que el paciente debe realizar en caso de deterioro. Debe incluir: el tratamiento de mantenimiento, cuando usar la medicación de rescate, cuando aumentar la dosis de esteroides inhalados, cuando iniciar una pauta de esteroides orales y cuando y como pedir ayuda médica.